El exjuez de Mayor Riesgo, Miguel Ángel Gálvez, denunció seguimientos a su familia y que sigue siendo víctima de constantes amenazas. Asimismo, advirtió que se están desmontando, deliberadamente, todos los casos que él llevaba.
Gálvez recientemente concedió una entrevista a elfaro.net de El Salvador en Washington, Estados Unidos (EE.UU.), en donde suma cinco meses en el exilio por las presiones e intimidación que experimentó luego de encarcelar y enviar a juicio a nueve policías y militares retirados, acusados de crímenes contra la humanidad cometidos durante el conflicto armado en Guatemala en el caso conocido como Diario Militar.
El exjuez de Mayor Riesgo expuso que desde que fue amenazado por Ricardo Méndez Ruiz, titular de la Fundación contra el Terrorismo (FCT), en mayo de 2022, el riesgo hacia su integridad física incrementó.
“Desde que me amenaza Méndez Ruiz en mayo se desata una campaña exagerada contra mí. Incluso me empiezan a dar seguimiento, entran a mi residencial… Me amenazan con una impunidad total”, declaró.
En ese sentido, denunció que hay seguimientos a sus familiares, lo cual le preocupa porque desde que está en el exilio no ha encontrado dónde asentarse y un trabajo estable “para poder llevar conmigo a mi familia a mi hijo, que siguen en Guatemala. Hacerlo antes sería irresponsable”.
“Por supuesto. Llevo cinco meses fuera del país, y siguen llegando carros a la casa de mi mamá. Se mantienen afuera, tomando fotos de la gente que sale y entra. Y hay gente de mi familia a la que han dejado sin trabajo. Es como si estuviéramos todavía en guerra: si para ellos eres un objetivo no se conforman con atacarte, quieren destruir todo a tu alrededor”, acotó.
Advierte que están desmontando los casos que llevaba
Gálvez, en sus 23 años como jurista, quien suma decenas de resoluciones contra grupos del crimen organizado, estructuras de corrupción y criminales de guerra, advirtió que están desmontando los casos que llevaba.
“Desde luego. Y no solo el caso Diario Militar sino todos los procesos que yo llevaba. Empezando por un asunto básico: ¿quién de los que pongan va a entender el proceso Cooptación del Estado, si eso a mí me llevó años entender todas sus ramificaciones? Lo mismo que sucede con el caso La Línea: las personas que quedaron a cargo ni siquiera entienden el proceso. ¿Qué futuro puede tener el caso en esas condiciones?”, agregó.
Persecución penal contra operadores anticorrupción
Miguel Ángel Gálvez exhibió que la fundación que dirige Méndez Ruiz encabeza una persecución penal contra jueces, fiscales y periodistas que son incómodos para el poder de turno.
“El objetivo era ese. ¿Quién trabajó con la CICIG? La FECI. Pues a ellos sacaron primero. Sacaron a Juan Francisco Sandoval, y dos años después está desmontada totalmente la FECI. Pero quedaban los jueces, y por eso Erika Aifán fue la primera que salió. Después vino mi caso, precisamente porque nuestros juzgados fueron creados de forma expresa para ver casos de estructuras criminales”.
Para finalizar, Gálvez aseguró que en Guatemala ya no existe apoyo para las personas que han luchado contra la corrupción.
“La cooperación internacional se está terminando. Apoyo ya no hay ni para las personas que están fuera, ni para quienes están detenidos, ni para quienes siguen en Guatemala, pero es evidente que van a tener que salir. Falta interés a nivel político para obligar a Guatemala a retomar los caminos del derecho”, concluyó.
Aquí puede leer la entrevista completa.